¿Cómo han mejorado los cepillos modernos los resultados de lavado?
Anteriormente los materiales que se elegían para los cepillos que se utilizaban en los sistemas de lavado de coches eran el pelo de polietileno y el filtro sintético, ya que garantizaban óptimos resultados en cuanto a poder limpiador, pero también presentaban innumerables desventajas, como el rápido desgaste y la escasa delicadeza en las pinturas.
La llegada de los cepillos CARLITE solucionó estos problemas: gracias a la estructura patentada de material expandido y a una fiabilidad garantizada, los cepillos CARLITE ofrecen un toque extremadamente delicado en las pinturas protegiendo su aspecto y su brillo y, al mismo tiempo, garantizan eficacias de lavado inigualables. Y, precisamente por ello, estos cepillos han conquistado el mercado rápidamente y representan hoy el producto para sistemas de lavado de coches más difundido en el mundo.
Además de los cepillos CARLITE, Favagrossa ha desarrollado otros productos que estamos convencidos que revolucionarán el concepto de lavado de coches, el primero de ellos el novísimo F-ACE.
Los cepillos F-ACE, gracias a su revestimiento especial de microfibra, garantizan resultados de lavado excepcionales incluso en la suciedad más obstinada, manteniendo siempre una increíble delicadeza en las pinturas.
Además, gracias a sus extraordinarias características técnicas, estos cepillos pueden utilizarse con revoluciones de motor mucho más bajas y con una menor cantidad de agua, una ventaja para los operadores a los que se les seguirá garantizando una calidad de lavado insuperable.
Por último, la empresa ha introducido recientemente en el mercado los novísimos cepillos lavaruedas TWISTER que, gracias a la especial inclinación de las cerdas y al uso de fibras distintas en cuanto a longitud y densidad, penetran eficazmente en las fisuras de las llantas garantizando resultados de lavado impecables incluso en los puntos más difíciles de alcanzar. Las cerdas, dotadas de una profunda “plumadura” no solo entran en los radios de punta, como ocurre con los cepillos tradicionales, sino que también lo hacen transversalmente, creando un increíble efecto de cepillado.
Estos cepillos patentados, que se pueden integrar con los sistemas de alta presión más modernos, ofrecen un lavado todavía más profundo que permite el uso de productos químicos menos “agresivos” y que evita tener que realizar laboriosos acabados manuales.